En el marco de los hechos delictivos y violencia de los que viene siendo víctima la ciudadanía rosarina, y como fuerza viva de la ciudad, nosotros representantes de los comercios queremos expresar nuestra absoluta preocupación y estado de alerta.
Desde hace más de una década trabajamos en diálogo con los tres poderes del Estado: el Ministerio de Seguridad, legisladores y fiscales para dar cuenta de los distintos delitos de los cuales el comercio y los vecinos eran víctimas. Evidenciamos el agravamiento de los hechos y modalidades, mientras tiempo atrás lo más frecuente y preocupante era el accionar de mecheras o arrebatos, hoy son más recurrentes las extorsiones y amenazas, y por supuesto el temor de todos y todas frente a las balaceras.
Ante esto, y entendiendo las diversas explicaciones que hemos recibido solicitamos a los actores competentes:
- Asignación de cantidad de efectivos policiales proporcional a la cantidad de habitantes que tiene Rosario, es decir, si la ciudad representa casi el 40% de los habitantes de la Provincia, el porcentaje de la fuerza policial debe ser el mismo.
- Asignación de recursos al MPA, para asegurar la efectividad y celeridad en las investigaciones de hechos delictivos.
- Control del cumplimiento efectivo de las penas.
- Inhibición absoluta de los medios de comunicación de presos de alto perfil dada la cantidad de delitos que son ordenados por los mismos desde el interior de las cárceles.
- Incremento de móviles policiales para tener la cobertura necesaria de prevención y reacción en todo el territorio de la ciudad y las zonas aledañas.
- Respaldo a los efectivos policiales en el uso de la fuerza armada para evitar delitos o perseguir a los delincuentes.
- Reformar, en caso de ser necesario, los marcos normativos a los fines de asegurar la solución a esta problemática.
Como decíamos anteriormente hace años que venimos dialogando por estas cuestiones, pero hemos decidido focalizar en distintas acciones y etapas nuestro pedido, en esta primera instancia con este documento y conferencia de prensa, y a posteriori no descartamos movilizaciones u otros modos para hacer oír nuestra voz y obtener resultados.